Tal como lo adelantó ayer el presidente Alberto Fernández en los anuncios que hizo para intentar contener la violencia narco en Rosario, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, llegará hoy a esa ciudad para presentar los nuevos agentes federales que actuarán allí y reforzarán el Comando Unificado. El gobierno nacional busca elevar el número de efectivos hasta 1400.
Aníbal Fernández participará de un acto en la zona del Bosque de los Constituyentes, en un sector de Rosario lindero al barrio Nuevo Alberdi y a la Avenida Circunvalación donde hay una base de las fuerzas. Con el ministro estará el gobernador Omar Perotti, que fue muy crítico del accionar del funcionario nacional en los últimos días; su par provincial, Claudio Brilloni; y el intendente Pablo Javkin.
Desde ayer arriban contingentes de oficiales a la ciudad del Monumento a la Bandera para sumarse a las operaciones. Anoche, por ejemplo, llegaron 200 gendarmes desde Córdoba, de acuerdo a lo que informó el diario La Capital.
En tanto, Perotti y Javkin celebraron las nuevas medidas por parte de la Casa Rosada, que incluyen también la llegada de la Compañía de Ingenieros del Ejército para la construcción de barrios populares, la firma de un convenio para instalar una delegación de la Unidad de Información Financiera (UIF) en Rosario -que se hará hoy- y el refuerzo de la custodia en el sistema carcelario contra los presos que están involucrados en delitos vinculados al narcotráfico.
El Presidente también recordó ayer dos decisiones que en realidad Perotti ya había acordado con el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, en un encuentro que ambos compartieron en la Casa Rosada: un convenio de colaboración y cooperación técnica con el Renaper para identificación de personas con rapidez en los operativos de seguridad y el aporte de 600 cámaras de vigilancia con reconocimiento facial.
En ese mitin, que se produjo en un momento de alta tensión entre el gobernador y Balcarce 50, no estuvieron ni Alberto ni Aníbal Fernández, pero se sumó a último minuto el jefe de Gabinete, Agustín Rossi, que también es santafesino.
“Vamos a hacer que Rosario recupere el orden, y así su vida social en libertad y con seguridad. Pero sobre todo vamos a hacer justicia, se lo debemos a las víctimas de las mafias y a los hijos de la ciudad. No permitiremos un solo acto de impunidad”, prometió ayer el Presidente, quien admitió: “La lucha contra el crimen organizado, a pesar de los esfuerzos realizados, no ha alcanzado los resultados que esperábamos”.
Estas expresiones del mandatario llegaron luego de días con la violencia escalada en Rosario y con una alta trascendencia mediática de la situación que allí acontece debido a la balacera contra un supermercado del suegro de Lionel Messi la semana pasada, a la que se sumó el homicidio de un niño de 12 años en Empalme Graneros, también en un ataque a tiros.