La jueza decidió abrir el celular del acusado y comenzaron a declarar testigos. Intervienen áreas especiales de la Procuración General. El hombre, de 35 años, brasilero y radicado en Argentina, será indagado hoy
La causa judicial por el intento de homicidio de la vicepresidenta de la Nación, Cristina Kirchner, comenzó a tener las primeras medidas de prueba para intentar determinar si más personas participaron del hecho, además de Fernando Andrés Sabag Montiel. La jueza caratuló el expediente como homicidio agravado en grado de tentativa.
Fuentes judiciales informaron a Infobae que los testigos comenzaron a declarar ante la jueza federal María Eugenia Capuchetti y el fiscal federal Carlos Rívolo, a cargo de la investigación. Se trata de militantes que estaban ayer a la noche frente al domicilio de Cristina Kirchner en Juncal y Uruguay y que vieron cómo Sabag Montiel se acercó hasta la vicepresidenta y le gatilló en la cara.
También declararán los custodios de la Policía Federal a cargo de la seguridad de la vicepresidenta. Además la justicia abrirá el celular del acusado. Lo hará en el juzgado de Capuchetti. De allí puede surgir información de los últimos días y horas de Sabag Montiel, de 35 años, brasilero y radicado en Argentina.
En la causas intervienen también dos áreas especializadas de la Procuración General de la Nación. La Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI), que trabaja sobre delitos informáticos, y le ofrecieron a la vicepresidenta la intervención de la Dirección General de Acompañamiento, Orientación y Protección a las Víctimas (DOVIC).
Sabag Montiel está detenido en la sede policial de la calle Cavia 3350 en el barrio porteño de Palermo a la espera de ser trasladado a los tribunales de Comodoro Py, en el barrio de Retiro, para ser indagado. Fuentes judiciales le dijeron a este medio que no hay horario establecido para ese trámite. En principio, lo acompañará el defensor oficial Juan Martin Hermida, que lleva más de una década como defensor en el fuero federal.
Por estas horas, también se está definiendo si la vicepresidenta será citada a declarar antes o después del acusado.
Ayer a la noche Cristina Kichner regresó del Senado a su casa y como es habitual desde hace 11 días, militantes la esperaba en apoyo a la causa judicial por la obra pública. La vicepresidenta saludaba y firmaba libros cuando una persona se le acercó, le puso un arma a centímetros de la cara y gatilló. La bala no salió y el hombre fue detenido.
El hecho fue repudiado por todo el arco político y el presidente Alberto Fernández ayer en cadena nacional. “Estamos obligados a recuperar la convivencia democrática que se ha quebrado por el discurso del odio que se ha esparcido desde diferentes espacios políticos, judiciales y mediáticos de la sociedad argentina. Podemos disentir, podemos tener profundos desacuerdos, pero en una sociedad democrática los discursos que promueven el odio no pueden tener lugar porque engendran violencia y no hay ninguna posibilidad de que la violencia conviva con la democracia”, dijo el jefe de Estado y declaró para hoy feriado nacional.
En tanto, esta mañana la jueza Capuchetti y el fiscal Rívolo estuvieron en la esquina de la casa de Cristina Kirchner
Capuchetti llegó a las 7:20, habló con los integrantes de la Policía Federal que trabajan en la zona desde anoche, y se retiró. No subió al departamento de Cristina Kirchner ni tuvo contacto con la Vicepresidenta. A las 7:45 ya había regresado junto a los fiscales a Comodoro Py para continuar trabajando en el caso, informaron fuentes judiciales.
La zona amaneció hoy con una importante custodia de la Policía Federal Argentina (PFA) tras el intento de magnicidio contra Cristina Kirchner. Además, mientras se llevan a cabo las pericias de rigor, se estableció un perímetro con una faja de color naranja con la leyenda “escena del crimen, no pasar”, la cual restringe el acceso a la zona donde se encuentra el departamento en el que reside la vicepresidenta.