La inflación de abril fue del 8,8% y acumuló 65% en los primeros cuatro meses de 2024, informó este martes el INDEC (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos).
La variación mensual muestra una desaceleración de 2,2 puntos contra marzo, cuando había sido de 11%.
Así, por primera vez en los últimos seis meses, la inflación mensual se ubica en un dígito. En tanto, la inflación acumulada en los últimos 12 meses llegó a 289,4%.
Las consultoras estimaban, en la previa, un número de entre 8% y 9%. El IPC de C&T para la región del Gran Buenos Aires presentó un incremento mensual de 8,7% en abril, siguiendo la tendencia a la baja de meses recientes. A su vez, la variación interanual fue de 298,1%. “Como ha ocurrido en febrero y marzo, estimamos que la inflación a nivel nacional será menor que en GBA por el mayor impacto de las tarifas”, señaló la consultora de Camilo Tiscornia. El rubro de mayor peso habría sido alimentos y bebidas con una suba de 6,8% en el mes, con gran predominio de panificados, carnes y lácteos.
Para Invecq, la inflación continuó con la desaceleración en abril. El IPC elaborado por la consultora indicó que la inflación de abril se ubicó en 9,5% mensual. Por su parte, la consultora Orlando J. Ferreres & Asociados registró una inflación del 9,6%. “En cuanto a los principales rubros, Vivienda y Educación encabezaron las subas del mes, con alzas mensuales de 53,6% y 9,6% respectivamente, seguidos por Alimentos y bebidas e Indumentaria, que presentaron una variación de 6,5% y 5,8% respectivamente”, indicó su informe.
El IPC de la Fundación Libertad y Progreso arrojó un aumento de 8,4% en abril, desacelerándose 2,6 puntos porcentuales respecto marzo. De esta manera, en los primeros cuatro meses del año el IPC acumula una suba de 64,4%. La variación interanual alcanza el 287,8%, similar al dato del mes anterior.
En tanto, desde EcoGo estimaron que la inflación de abril fue del 8,8%, acumulando un aumento del 66,2% en los primeros cuatro meses del año y presentando una variación interanual del 304,4%. “La tensión entre el freno en la actividad y el aumento en precios regulados se sostiene en abril, con una dinámica donde a la caída de los salarios reales se suma la corrección de precios relativos, que fuerza a la redistribución del gasto a favor de los servicios regulados y deja poco espacio para el consumo”, aseguraron desde la consultora.
El Gobierno acompañó el sendero de desinflación con una baja de tasas de interés del BCRA. El 50% anual que el Central determinó para la tasa de política monetaria ya representa, un 4,2% mensual. Las señales de desaceleración inflacionaria llevaron al Gobierno a apurar una caída en la tasa de interés. Ante un IPC más leve que la expectativa de mercado, el Central podría ver espacio para una reajuste adicional.