El Gobierno anunció esta mañana los resultados de una primera etapa de auditoría en el ministerio de Salud, donde se redujo en 60% la “planta política” y se aplicó un recorte de $140 mil millones.
En el inicio de su habitual conferencia de prensa en Casa Rosada, el vocero presidencial, Manuel Adorni, informó “algunas cuestiones de interés público en el marco de las auditorías que el Gobierno está llevando adelante en cada uno de los organismos del Estado”.
En esta primera etapa, indicó el portavoz, “se redujo un 60% la planta política, donde había roles que incluso se superponían”. “Esto implica un ahorro de $13.464 millones”, señaló.
Se terminaron, además, “subsidios a empresas de salud privada y se dieron de baja 48 vehículos de la flota del ministerio y se finalizó el contrato con 619 consultoras en torno a los $1150 millones en el marco del rediseño del Plan Nacional de Prevención del ENIA (Embarazo No Intencional en la Adolescencia)”.
Adorni comunicó también que “se comenzaron a revisar requisitos de inscripción en el registro de productores de cannabis (Reprocann), en el que se detectó que en la gestión anterior se emitieron más de 90 mil solicitudes sin diagnósticos basados en evidencia científica”.
Por último denunció “irregularidades varias”, entre ellas expedientes de compras paralizados, órdenes de compras abiertas sin ejecutar y el uso por anticipado de dinero asignado para programas con financiamiento internacional.
“El recorte en esta primera etapa es de $140 mil millones. Esto es parte del desarmado que queremos hacer con este Estado empobrecedor al que se ha llamado ‘Estado presente’, que lo único que hizo fue empobrecer a la gente y favorecer a amigos de los funcionarios de turno”, sentenció el vocero.
Por otra parte, el Gobierno volvió a condenar públicamente el ataque de Irán a Israel del pasado sábado y remarcó que la posición que mantiene el presidente Javier Milei es la de “defender al mundo libre”. Adorni aclaró que Javier Milei no recibió amenazas desde que se produjo el ataque contra Israel y remarcó que la postura argentina ante el conflicto bélico no pone al país como blanco de eventuales atentados.