La línea de subte D permanecerá cerrada con el objetivo de concluir las obras de modernización del sistema de señales y la sustitución de las máquinas de cambio, según lo anunciado por la empresa SBASE (Subterráneos de Buenos Aires S.E.).
Se trata de una obra indispensable que incluirá la renovación del sistema de señales y el reemplazo de las máquinas de cambio de vías, entre otras intervenciones. De esta manera, se buscará mejorar la operación garantizando la regularidad y la eficiencia del servicio con la última tecnología en materia de señalización.
Sin embargo, desde la cartera que dirige el ministro Pablo Bereciartúa señalaron que la razón por la que tales refacciones se realizarán en temporada de verano es porque la cantidad de pasajeros se reduce a un 40%. En un día hábil normal se trasladan unas 200 mil personas por día en la traza que une Congreso de Tucumán (en el límite entre los barrios Belgrano y Núñez) con Catedral (en el microcentro porteño), mientras que en enero y febrero los usuarios diarios suelen ser 120 mil.
En el marco del Plan Integral de Renovación de Estaciones, se aprovechará también para terminar las obras de renovación en Facultad de Medicina, las cuales solo pueden realizarse con la estación cerrada.
Debido a la interrupción del servicio durante estos dos meses, las autoridades del Gobierno porteño sugirieron algunas alternativas de movilidad, que incluyen diversas opciones de colectivos con origen en las terminales que forman parte de la línea D. La mayoría recorren principalmente las avenidas Cabildo, Santa Fe y Córdoba.