El candidato a Jefe de Gobierno de CABA por Unión por la Patria (UP), Leandro Santoro, aún no definió si bajarse del balotaje en el que debería enfrentar al candidato de Junto por el Cambio, Jorge Macri, que obtuvo el 49,61% de los votos y quedó a milésimas de coronarse en la elección general. “Lo estamos discutiendo” aseguraron desde el peronismo porteño
Santoro esperará al escrutinio definitivo para determinar si está en condiciones de competir o no en una segunda vuelta. La norma indica que el ganador debe alcanzar el 50% de los votos y, si eso no sucede, deberá volver a competir en un balotaje.
En la oposición porteña estiman que el conteo final se conocerá entre el viernes y sábado. Aceptan que lo que debe evaluarse en ese momento es la distancia que hay para que Macri gane en primera vuelta. “No es lo mismo que le falten 6000 votos a que le falten 10″, destacaron.
“Hoy no hablé con Massa. Hablamos ayer en el búnker. Como los números que tenemos son muy finitos, quedamos en que vamos a esperar el resultado definido” El diputado nacional alcanzó el 32,20% de los votos y se quedó con el segundo puesto, relegando a Ramiro Marra, de la Libertad Avanza, al tercer lugar.
Es decir que la evaluación concreta recién se hará cuando se sepa cuál es la cantidad de votos que separan a Macri del triunfo. Mientras tanto, el dirigente de UP mantiene la idea de competir en una segunda vuelta. En su entorno hay cautela y paciencia para esperar. No quieren apresurarse en dar definiciones ni sentencias hasta que no estén los datos concretos.
“Tomar cualquier decisión antes del recuento definitivo sería imprudente”, indicaron desde el entorno del legislador. Ayer en el búnker de UP había mucha satisfacción por los resultados obtenidos en todas las categorías. Sabían que la elección porteña era difícil pero destacaron la cantidad de votos que juntó Santoro.
El candidato de UP ya quedó parado como el principal referente del espacio político en la Ciudad de Buenos Aires. Más allá de si pasa o no al balotaje. Pero si ingresa, tiene la posibilidad de acumular votos de la izquierda y de un sector de los libertarios. A eso aspira.
La elección de Santoro fue de la mano con sus expectativas. En UP sabían que iba a ser un duelo difícil pero, desde un primer momento, consideraron que era posible que Macri no alcance el ansiado 50%. De todas formas reconocen que el poderío del PRO en el territorio porteño sigue siendo muy fuerte.
Macri fue uno de los ganadores de Juntos por el Cambio que hubo ayer, en una jornada sombría para la oposición nacional, que quedó al borde de la fractura, con el radicalismo enfrentado al PRO y múltiples cuestionamientos contra el ex presidente Mauricio Macri flotando por las distintas terminales opositoras.
En el peronismo ya están concentrados en el nuevo tramo de la campaña electoral. Serán tres semanas intensas. A todo o nada. La elección porteña es lo único que queda por resolverse. El resto de las provincias ya tienen gobernador nuevo o reelecto. El mapa federal quedó dividido en tercios entre el peronismo, las fuerzas provinciales y Juntos por el Cambio.
El Código Electoral porteño establece que el balotaje se debe realizar dentro de los 30 días posteriores al momento que se realizó la primera votación. En ese caso, podría coincidir con el domingo 19 de noviembre, fecha en la que está programado el balotaje nacional entre Sergio Massa y Javier Milei.