MENDOZA.- Era la crónica de una ruptura anunciada, pero el diputado Omar de Marchi, líder de Pro en tierra cuyana, provocó un verdadero terremoto político, con réplicas que seguirán en los próximos días, rumbo a las elecciones provinciales. Así, la decisión de abrirse de Cambia Mendoza para jugar por fuera contra el radical Alfredo Cornejo en el camino hacia el Sillón de San Martín, tiene alto impacto no sólo en Mendoza sino en el armado nacional “amarillo” dentro de Juntos por el Cambio, por el vínculo que el legislador “rebelde” aún mantiene con el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
La decisión derivó en la inminente intervención en suelo mendocino de Pro, decidida por Patricia Bullrich y el propio Rodríguez Larreta, que delegó en uno de sus armadores, Eduardo Macchiavelli, la tarea de “trabajar para garantizar” que Pro continúe dentro del frente Cambia Mendoza. El senador Humberto Schiavoni sería designado como interventor, según fuentes de Pro.
De todos modos, la decisión de De Marchi se convirtió en una real amenaza para las aspiraciones de Cornejo, exgobernador y actual senador nacional, quien hoy lidera las encuestas. Sucede que De Marchi empieza a construir un frente electoral con otras caras de relevancia, con el objetivo, en primera instancia, de erigirse como la nueva tercera fuerza en la tierra del sol y del buen vino, después de ocho años de compartir el espacio.
“Era lo esperado, aunque se trató de todas las maneras de que no rompiera. La verdad que es siempre el mismo: rompe, rompe y nunca gana. Pero, igual será una elección complicada, porque el clima social está raro. Hay malestar en todos lados, por eso no es bueno el panorama; es un dolor de cabeza”, expresó una fuente del radicalismo mendocino, tras la decisión del hombre nacido en la comuna de Luján de Cuyo que sueña con llegar al Palacio Cívico.
De hecho, por estos días, crecen las negociaciones del demarchismo para también ser parte, en las PASO, de la propuesta electoral local de Javier Milei, el candidato libertario a la Presidencia, que no deja de crecer en los sondeos provinciales, y que ya se unió, por ejemplo, al Partido Demócrata y al Partido de los Jubilados, por lo que su influencia ya no es sólo entre los jóvenes.
“Hay que lograr una tercera fuerza poderosa. Con De Marchi tenemos el condicionamiento de su cercanía con Larreta, pero creemos que es subsanable; es cuestión de conversarlo. Omar sería una persona bienvenida al frente. Nos puede aportar mucha experiencia de gestión”, señaló José Caviglia, presidente del Partido Libertario en Mendoza, que busca también ir a las PASO con un candidato propio, en declaraciones a Radio Mitre Mendoza. Previo a la decisión de De Marchi, el primero en romper con Cambia Mendoza fue Jorge Difonso, diputado provincial de Unión Popular y aspirante a la gobernación, quien también iría al encuentro con el lujanino, bajo el impulso del PD, que los vio nacer y crecer juntos.
En tanto, en el peronismo tradicional no descartan aún acercarse a De Marchi. Al menos, referentes justicialistas históricos y con peso en las principales comunas lo consideran una figura interesante para integrar una alternativa al cornejismo en tierra cuyana. Así, más allá de que intentan definir un candidato propio, que podría ser uno de esos jefes comunales, no le cierran la puerta al diputado nacional.
“Hace falta aire fresco, otro proyecto para Mendoza. Roberto Righi (intendente de Lavalle) puede ser uno de los que represente ese proyecto. Tiene que ser alguien que tenga un discurso conciliador. No es Cornejo, puede ser De Marchi, que demuestra un cambio de actitud importante. Creo que hay que tener una relación de dialogo. El límite es Cornejo o Macri no De Marchi”, expresó el diputado provincial justicialista Omar Félix, candidato a intendente de San Rafael y hermano de Emir, actual jefe comunal.
Incluso, sobrevuela también la posibilidad de que estos caciques se abran de la agrupación para formar coalición con De Marchi. Eso sí, las fuentes consultadas en el kirchnerismo, que ocupa la presidencia del PJ en Mendoza, se mantienen firmes, rechazando toda posibilidad de un lugar para el lujanino. “El límite es De Marchi. El que se va del peronismo lo tendrá que explicar. La gente está cansada y enojada, pero no avala cualquier opción”, confió a LA NACION una figura camporista. Sin embargo, dejó un mensaje: “De Marchi está haciendo algo saludable para Mendoza: habrá un mejor equilibrio institucional. Ojalá que al menos se logre eso, porque hoy somos Santiago del Estero, un feudo. No creo que le vaya bien en las urnas y menos que la gente se crea que representa a Milei, pero reivindico su aporte”.
Todo está por verse. Habrá que esperar al 12 de abril para conocer la conformación final de las alianzas. Luego, el 22 de abril será el turno del cierre de listas. De Marchi, finalmente, ya dio el primer paso, por afuera. En tanto, Cornejo, aguarda expectante el desarrollo de la campaña, en un clima cada vez más enrarecido.