La Secretaría de Energía instruyó ayer al ENRE a que presente una denuncia penal contra el directorio de Edesur por malversación, fraude en perjuicio de la administración pública y abandono de persona. Ocurre tras varios días de cortes de luz en el área de concesión de la empresa, cuyos prestatarios habían anunciado que abandonarían el país.
Energía le exigió al ENRE que eleve el informe a la Bicameral de Seguimiento de los prestadores de servicios públicos a fin de que aconseje si corresponde dar por terminada la concesión.
La italiana Enel, que maneja la concesión de Edesur, empezaba en marzo el proceso de venta de su principal activo en la Argentina.
A fin de febrero, Enel comunicó que la operación se llevará a cabo a través del banco Santander. Edesur tiene 2,6 millones de clientes y abastece de electricidad a siete millones de personas en el sur del área metropolitana de Buenos Aires (12 comunas de la Ciudad y 12 partidos de la provincia).
Si bien no hay estimaciones del valor de la distribuidora, cuando Edenor cambió de administradores, en diciembre de 2020, la operación se llevó adelante por US$100 millones por el 51% de la compañía. En ese entonces, los empresarios Daniel Vila, José Luis Manzano y Mauricio Filiberti le compraron esa participación accionaria a la empresa Pampa Energía, de Marcelo Mindlin. Enel, por su parte, tiene el 75% de las acciones de Edesur.
El anuncio del Gobierno se produce después de dos semanas de una ola de calor extremo, con picos de demanda energética históricos, y en los que más de 100 mil usuarios por día, en promedio, se vieron afectados por la falta de servicio en distintos puntos del AMBA. La mayoría de ellos, vinculados al área de concesión de Edesur.
El interventor del ENRE, Walter Martello, dijo varias veces a lo largo de estos meses que la situación de la empresa es “insostenible”. El oficialismo, y sobre todo los intendentes del conurbano, que gobiernan los municipios en los que está Edesur, vienen haciendo presión para apurar la salida de Enel. Lo llamativo es que fue la propia Enel la que anunció su salida a fines del año pasado.
Hoy, la secretaria de Energía, Flavia Royón, se reunió con intendentes del GBA y con el jefe de Gabinete de Kicillof, Martín Insaurralde. También estuvo allí el titular del ENRE, Martello.
En las redes, Mayra Mendoza, la intendenta de Quilmes, contó: “Coordinamos realizar todas las acciones legales pertinentes para que la empresa cumpla con sus obligaciones y reestablezca el servicio. Nuestra responsabilidad y compromiso es con los vecinos y las vecinas de nuestros municipios de la provincia de Buenos Aires”.
Auditoría y otra denuncia penal
La Defensoría del Pueblo bonaerense, a cargo de Guido Lorenzino, había denunciado penalmente a Edesur el 14 de febrero. El ENRE, en tanto, anunció el martes que enviaría al Congreso un informe con una auditoría sobre la calidad del servicio y el supuesto incumplimiento de la empresa.
También, anticipó que pediría la caducidad de la concesión: “La auditoría en curso considera la evaluación operativa y de gestión de la distribuidora que han derivado en la falta de atención en tiempo y forma de los reclamos de los usuarios en la reposición del servicio, incumplimientos estos que más allá de los indicadores globales e individuales de calidad, denotan cuestiones subyacentes que pueden afectar la continuidad de la concesión”.
Marcha y tensión en la puerta de Edesur y la postura de la empresa
Mientras tanto, los usuarios que, en algunos casos, están sin luz ni agua hace varios días, en la Ciudad y el conurbano, convocaron a una manifestación que hasta anoche seguía en la puerta de Edesur en Alberdi y Lacarra. La marcha tuvo un origen pacífico. Pero el ánimo estaba caldeado, sobre todo por la presencia para algunos “desmesurada” en la cantidad de policías.
Este martes por la noche había gente manifestándose con carteles y algunos que habían prendido fuego gomas. Familias y vecinos se acercaban para traer su reclamo o para solidarizarse con quienes estaban pasando un mal momento. Sin embargo, ante la falta de respuesta de las autoridades de la empresa, los manifestantes comenzaron a elevar su reclamo y alrededor de las 18.30 decidieron quemar unas maderas.
“La gente tiene derecho a reclamar, pero es necesario cuidar la salud de los trabajadores”, indicó Edesur, y precisó que se sigue trabajando en los lugares donde falta el suministro para regularizar la situación. La empresa también añadió: “Estas fallas se producen en el marco de 16 días de ola de calor ininterrumpida, con redes sobreexigidas, con temperaturas muy elevadas, incluso, por las noches en las que no hay descanso de la red eléctrica”, sumó la empresa proveedora de electricidad. Respecto a la frecuencia de los cortes, la compañía hizo referencia a las inversiones de largo plazo que se necesitan y, que según precisó, se están llevando adelante “desde hace cinco años”.
La presidenta del PRO, Patricia Bullrich, cuestionó al gobierno por la denuncia, y exigió ante esta situación de deserción de las autoridades: “Queremos soluciones y no denuncias penales”.