El jefe de Estado definió que la secretaria Todesca Bocco dispute la dirección del organismo regional de crédito y selló con su colega de Francia una acuerdo para apoyar las negociaciones sobre la transición democrática que el régimen de Maduro y la oposición venezolana protagonizan en México
Alberto Fernández definió ayer en París que la secretaria de Relaciones Económicas Internacionales, Cecilia Todesca Bocco, compita por la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ante la imposibilidad de lograr una candidatura de consenso que fuera avalada por Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y Lula da Silva.
El jefe de Estado buscó durante semanas que su colega de México aceptara una estrategia de acuerdos para designar a un candidato competitivo para el BID, mientras que el presidente electo de Brasil apoyó privado las intenciones de Alberto Fernández y después en público se abstuvo de cuestionar al candidato designado por Jair Bolsonaro días antes del balotaje.
La insistencia cotidiana del presidente para designar un candidato avalado por los principales países de la región fue una tarea compleja y sin resultados positivos. Lula ni siquiera habló por canales informales con Ilan Goldjan -postulante de Bolsonaro e influyente tecnócrata del Fondo Monetario Internacional (FMI)- para solicitar su paso al costado. ,
Y AMLO fue fiel a su habitual estilo florentino: le prometió a Alberto Fernández que jugaría a su favor, y en menos de tres semanas, designó a dos candidatos distintos para competir en nombre de México. Alicia Bárcena, que es embajadora en Chile, y Gerardo Esquivel, un economista egresado de Harvard que es vicepresidente del Banco Central.
En este contexto, Alberto Fernández abandonó su estrategia de consenso regional y decidió presentar una candidatura de la Argentina. El presidente eligió a Cecilia Todesca Bocco, una economista egresada en Columbia que ocupa la secretaría de Relaciones Económicas Internacionales. Goldjan es el candidato a vencer por Todesca, y eso sólo puede ocurrir si Joseph Biden avala la decisión política de Balcarce 50.
En París explicaban anoche que el Presidente ya está negociando con países cercanos -Paraguay, Bolivia, Perú y Colombia-, y aguarda sumar masa crítica para después lanzar una nueva ronda de negociaciones con Chile (que presentó candidato), AMLO que ahora apoya Esquivel y Lula, que con una simple declaraciones termina con la postulación de Goldjan.
Alberto Fernández dejará para lo último su avanza definitiva sobre la Casa Blanca. La elección es el próximo 20 de noviembre, y todas las opciones están sobre la mesa. Sin embargo, ante la ausencia de un candidato que represente a la mayoría de los países de la región, Goldjan será respaldado por la Secretaría del Tesoro y se convertirá en presidente del BID.
Además de definir la candidatura de Todesca Bocco, que implicó decenas de llamadas a Washington y las principales capitales de América Latina, Alberto Fernández selló con Emmanuel Macron una alianza tácita para influir en las negociaciones sobre la transición democrática que protagonizan representantes de Nicolás Maduro y la oposición política en México.
El Presidente y su colega francés se encontraron ayer en el Palacio Eliseo y dialogaron respecto a Venezuela. La guerra en Ucrania desató una crisis energética en Europa y el petróleo que ya no provee Vladimir Putin ahora podría ser reemplazado por las reservas comprobadas que maneja Nicolás Maduro.
Alberto Fernández siempre cuestionó los bloqueos económicos y las sanciones financieras que Estados Unidos y Europa impusieron al régimen de Maduro. El presidente argentino también criticó al Grupo de Lima -empujado por Donald Trump desde el Salón Oval- y la decisión política de la comunidad internacional de apoyar al líder opositor Juan Guaidó.
La ruptura del suministro de petróleo en Europa, la agonía del Grupo Lima y la debilidad actual de Guaidó fueron acontecimientos tomados en cuenta por Macron al momento de aceptar la perspectiva de Alberto Fernández sobre la situación de Venezuela.
El presidente argentino y Macron coincidieron que es necesario profundizar el diálogo entre el régimen de Maduro y la oposición, y valoraron el próximo papel que asumirá Lula cuando suceda en el Planalto a Bolsonaro. Ambos mandatarios sostuvieron que el presidente electo de Brasil será clave para fortalecer las negociaciones que se ejecutan en México.
Aún se esta conversando bajo secreto diplomático, pero es muy probable que Argentina se sume al grupo de apoyo que respalda las negociaciones entre Maduro y la oposición democrática. Estados Unidos aceptaría su participación que ya tiene los avales respectivos en AMLO, Maduro y Macron.
Hoy a la tarde, en el Foro de París por la Paz, habrá un encuentro reservado que organizó Macron con Alberto Fernández, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, y los negociadores venezolanos que interactúan en México, Jorge Rodríguez en nombre del régimen, y Gerardo Blyde en representación del bloque antichavista.